Argimón participó en la fiesta de la Noche de San Juan de Montevideo

La vicepresidenta rememoró la celebración de esta festividad de origen religiosa en su infancia y destacó su valor para unir a las personas

Este jueves 23 de junio se celebró la Noche de San Juan de Montevideo, realizada en la plaza José Pedro Varela de Pocitos. Allí, junto a la icónica fogata que caracteriza esta celebración, estuvo la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón.

La jerarca reconoció que esta celebración, que originalmente representaba el júbilo por el solsticio de verano y que luego se tomó para celebrar el nacimiento de San Juan Bautista, forma parte de su familia, que tiene raíces catalanas.

“Argimón es un apellido catalán y desde muy chiquita nos juntábamos en la noche del 23”, confesó. “La tradición era el chocolate que la abuela hacía y se quemaban las cédulas. Además, para las solteras se daban determinados tips, se prendían velitas amarillas y demás”, añadió.

Entre risas explicó que uno de esos tips era “poner en agua una clara de huevo y dejarla toda la noche al aire, afuera de la casa”.

Al consultársele qué fue lo que arrojó a la fogata explicó que siempre trata de arrojar aquello de lo que quiere deshacerse. “Yo siempre tiro lo que quiero dejar, así me enseñaron. No puedo decirlo porque no se cumple, pero son los malos tiempos, cosas que por suerte estamos superando como sociedad”, relató.

Sobre probar la comida y bebida que se prepara en el sitio dijo: “Uno no se puede ir sin probar la bebida, pero como no voy a tomar en pública. Mi abuela la hacía, pero nunca nos dejó ver la receta”.

“Mis abuelas fueron muy importante las dos, una era catalana, la otra gallega. Tengo divinos recuerdos de esas épocas y lo que significan para mí y estas fiestas me acercan a ellas”, expresó.

En cuanto a si creía que se perdió la tradición en las generaciones actuales, sostuvo que cree que es “distinto”.

“La gente del Cazal Catalá fueron los primeros que hicieron pública la fogata; hoy empezamos a ver fogatas en distintos lugares del país, porque la gente merece estar junta, nos merecemos, después de tanto tiempo, estar juntos; el éxito se ve”, concluyó.

Con la activista cubana Carolina Barrero

Este jueves, la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, recibió a la activista cubana defensora de los derechos humanos Carolina Barrero.

Barrero es una joven historiadora del arte que fue “forzada al exilio en febrero luego de apoyar los reclamos de las madres de los jóvenes presos políticos el 11J en Cuba” sostuvo Argimón.

“Reiteramos nuestro compromiso por los valores democráticos”, sentenció la vicepresidenta.

En la tarde de este jueves la activista será expositora en la conferencia “A un año de las protestas del 11J: Arte y resistencia en Cuba”. Se trata de un evento organizado por el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL), que contará con la apertura de la senadora por el Partido Nacional, Gloria Rodríguez; la moderación de la consultora de CADAL, Diana Arévalo; y las ponencias de la directora interina para las Américas de Human RightsWatch, TamarTaraciuk y la alcaldesa del Municipio CH, Matilde Antía.

Las protestas en Cuba

Sobre finales de enero las autoridades de la Seguridad del Estado de Cuba detuvieron a Barrero y, según relató, le dieron 48 horas para abandonar la isla. De acuerdo con lo contado a El Mundo de España, a la joven la chantajearon con que, de no irse, procesarían por el delito de desorden público a las madres detenidas y los activistas que las acompañaban en las protestas por la liberación de los presos políticos detenidos durante la protestas que tuvieron lugar en Cuba en julio del año pasado.

Estas protestas contra el régimen de Miguel Díaz-Canel tuvieron lugar del 11 al 17 de julio de 2021 y fueron las más grandes desde el “maleconazo” de 1994. Los ciudadanos cubanos tomaron las calles debido a la crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus, así como la escasez y racionamiento de productos básicos y alimentos.

El pasado 14 de junio la Fiscalía General de la República de Cuba informó la condena de 381 personas detenidas por esas protestas. De este total, 197 recibieron penas de entre cinco y 25 años de prisión. Los delitos por los cuales los sentenciaron fueron sedición, sabotaje, robo con fuerza, violencia, atentado, desacato y desórdenes públicos. La mayoría de los condenados tienen una edad comprendida de entre los 16 y 18 años.

Por otro lado, a las 84 personas restantes (dentro de ellas 15 jóvenes) les impusieron penas que no comprenden prisión. 

Deja una respuesta

Your email address will not be published.

Últimos artículos de Nacionales