La vida de Carlos De Pena dio un giro este año. Tras poco más de tres años en Ucrania defendiendo al Dínamo de Kiev, el futbolista uruguayo retornó a Sudamérica a fines de febrero tras la invasión rusa.
El mediocampista se enroló en Internacional de Porto Alegre y en los últimos meses ha cuajado un rendimiento que bien podría llamar la atención de Diego Alonso, director técnico de la selección de Uruguay, que en noviembre estará participando de la Copa del Mundo 2022.
Pese a que es volante, por diferentes circunstancias el nacido en Montevideo también tuvo que desempeñarse por banda, como extremo o incluso lateral, aunque terminó asentándose en la mitad de la cancha, como interior o como mixto.
En 31 partidos que ha disputado junto a Internacional, el futbolista pasa por su mejor momento: ha sido elegido en el equipo de la semana por diversos medios de comunicación, es uno de los extranjeros más destacados del Brasileirao y actualmente es el máximo asistente del ‘Colorado’.
De Pena ha entregado 60 balones decisivos, de los cuales seis fueron aprovechados de manera correcta por sus compañeros, siendo pases directos de gol. Además, tiene tres goles, ocho grandes ocasiones de gol fabricadas y 44 disparos al arco.
Como también ha estado en la lucha en medioterreno, el uruguayo exhibe buenos números en dicho ítem, con 199 balones recuperados y 44 intercepciones, según recoge la aplicación SofaScore. Su aporte no es menor, pues en los 31 encuentros que disputó, su equipo ganó 14, empató 13 y perdió solamente cuatro veces.
En definitiva, De Pena pasa a sus 30 años uno de los mejores momentos de su carrera futbolística y no sería extraño verlo en algunas de las pruebas previas que tendrá el seleccionado uruguayo antes de Qatar 2022.
