CASMU desarrolla el Programa de Salud Renal con enfoque multidisciplinario y preventivo

La institución realiza el seguimiento de pacientes, socios y no socios, que padecen una enfermedad renal y planea duplicar la atención a raíz de sus resultados.

Más de 25.000 pacientes forman parte del Programa de Salud Renal (PSR), integrado por algunos prestadores de salud, el Fondo Nacional de Recursos, el Ministerio de Salud Pública, la Cátedra de Nefrología y la Sociedad Uruguaya de Nefrología, con el objetivo de prevenir la aparición de la enfermedad renal, su detección oportuna, y evitar que progrese en aquellos casos en los que ya está instalada.

Más de 2700 pacientes se atienden en el PSR de CASMU, una de las primeras instituciones en implementarlo hace 15 años, con excelentes resultados en cuanto a seguimiento y control. Para lograrlo, cuenta con una estructura diseñada para que la iniciativa sea eficaz y pueda cumplir con ese objetivo, con una red de atención nefrológica ambulatoria en 21 policlínicas centralizadas y descentralizadas, nutricionistas, servicio social, psicología, y enfermería universitaria.

El jefe del Departamento de Nefrología de CASMU, Dr. Alejandro Ferreiro, señaló que la institución ha contribuido a demostrar el impacto positivo de la estrategia multidisciplinaria, logrando que el 60% de los pacientes estabilicen su función renal, con una disminución de la mortalidad cardiovascular superior al 35%, y un retraso de la necesidad de diálisis o trasplante de más de 6 años en quienes lo requieran, comparado con pacientes que no controlan su enfermedad renal crónica habitualmente.

El principal impacto de esta enfermedad es la pérdida de años de vida asociada a un aumento en la frecuencia de eventos cardiovasculares y exceso de mortalidad. 

Las causas que aceleran la progresión de la enfermedad renal se relacionan a varios factores. Entre ellos, la persistencia del motivo que originó la enfermedad, como por ejemplo, la toma indiscriminada y continua de analgésicos, la uropatía obstructiva no tratada, o la hipertensión arterial no controlada. También se incrementa en el caso de los diabéticos que no se controlan, y en quienes presentan obesidad o son fumadores y no modifican sus hábitos. 

“Se ha demostrado que en las personas que ingresan y se mantienen enel programade atención de la salud renal, con nefrólogo, enfermero, asistente social y nutricionista, que van a los controles, hacen los exámenes y cumplen la medicación, disminuye un 35% la tasa de eventos cardiovasculares fatales”, resaltó el especialista.

En Uruguay hay 3.500 pacientes dializados y trasplantados, y quienes lo requieran deben prepararse física y psicológicamente. En estos casos, cuando la pérdida de función renal puede amenazar la vida, el paciente debe optar por el mejor tratamiento de sustitución de acuerdo a su patología y preferencia, de manera oportuna y coordinada. 

Este proceso debe estar acompañado por un equipo profesional altamente capacitado, que se denomina Grupo de Enfermedad Renal Avanzada. CASMU ha desarrollado una vastísima experiencia en este sentido, con más de 220 pacientes que reciben asistencia en los IMAEs de Hemodiálisis y Diálisis Peritoneal. 

El principal obstáculo para la mejor comprensión de la enfermedad renal incluye la baja calidad de información y conocimiento sobre la salud, tanto en el personal como en los pacientes.

“Para superar las barreras, la mejor estrategia es potenciar el empoderamiento del público general, los pacientes y sus cuidadores, en cuanto a adoptar hábitos de vida saludables, interesarse en conocer la situación de su salud renal, y su participación activa en los programas. El paciente no solo debe ser un receptor de consejos y tratamientos, sino que debe ser promotor de su propia salud general, incluyendo la renal”, destacó el jefe del Departamento de Nefrología de CASMU.

Una preocupación general, según Ferreiro, es que lamentablemente no todas las instituciones prestadoras de salud en Uruguay tienen Programas de Salud Renal,aún conociendo el beneficio que representa para la población, y remarcó la importancia de ejecutar este programa de forma estratégica e integral.

En tanto, el Departamento de Nefrología de CASMU mantiene certificado su sistema de gestión de calidad por UNIT, en la norma ISO 9001/2015, y según explicó Ferreiro, uno de los objetivos de la institución es duplicar en tres años el número de pacientes identificados y en seguimiento en el PSR, dada la relevancia de esta iniciativa.

Calidad asistencial

El Programa de Salud Renal de CASMU es auditado de manera externa por la Comisión Asesora de Salud Renal anualmente, con muy buenos resultados e indicadores de proceso, resultado y cumplimiento.

El Programa tiene un área de educación a dos niveles: con los pacientes, para el desarrollo de hábitos saludables para su salud renal, y con los agentes de salud para que puedan hacer un diagnóstico de la enfermedad y realizar derivaciones hacia el programa en los casos que corresponda.

El diagnóstico temprano requiere detectar los casos asintomáticos, buscando la enfermedad en las personas que tienen riesgo de padecerla. De allí la importancia de las campañas de concientización de la población y la capacitación de los profesionales de la salud que tienen la posibilidad de tener contacto con los pacientes. 

En segundo lugar, una vez realizado el diagnóstico, existen estrategias terapéuticas útiles, científicamente comprobadas, que limitan o detienen la progresión inexorable de la enfermedad y las consecuencias que depara. Este abordaje no se basa en la acción del médico exclusivamentesino en el trabajo multidisciplinario, e involucra a profesionales de la salud de manera coordinada, logrando mejores resultados, y siempre manteniendo el diálogo y el control conjunto con el médico de cabecera. 

“Tanto en la enfermedad aguda como en la crónica, el diagnóstico precoz y la instrumentación de medidas terapéuticas adecuadas disminuye la gravedad y severidad, al tiempo que limita la progresión y sus consecuencias nefastas. Entre los principales beneficios es de destacar la ganancia de años de vida, y el retraso, en años dela necesidad de inicio de diálisis o trasplante”, señaló Ferreiro.

Los afiliados a CASMU que quieran consultar pueden realizarlo agendándose en la policlínica nefrológica, a través del teléfono 144 o personalmente en el primer piso del Policlínico Central. Los no socios podrán coordinar una consulta a través de Medis Group, teléfono 27161617.

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