El piloto español Carlos Sainz (Ferrari) ha sido el más rápido en la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Italia, decimosexta prueba del Mundial de Fórmula 1, por delante del neerlandés Max Verstappen (Red Bull) y el monegasco Charles Leclerc, quien acabó primero por la mañana.
Tras una primera prueba dominada por Ferrari -hoy de amarillo para conmemorar los 100 años del Autódromo de Monza- Verstappen esta vez sí mostró sus cartas, aunque no pudo superar al español, superando a su compañero Leclerc, quien lideró los primeros libres.
Precisamente, la segunda sesión empezó con el monegasco pintando de morado los tres sectores. Así, Leclerc, con medios, marcó el mejor crono en los primeros diez minutos de la tarde. Un tiempo que a los minutos mejoraría Verstappen para poner más emoción.
Valtteri Bottas (Alfa Romeo) fue el primero en salir con neumáticos blandos en el segundo intento, lo que animó al resto de contendientes para probar el potencial de cara a la clasificación. No obstante, antes de que se decidiesen los claros favoritos, la sesión se paró en el ecuador con la bandera roja de Mick Schumacher con su Haas, que se quedó sin potencia.
Una vez con bandera verde, Sainz pulverizó el tiempo del fin de semana, con 1:21.664 para volver a dominar los libres. McLaren también dejó buenas sensaciones con el cuarto puesto de Lando Norris. En el caso de Mercedes empezó la mañana con un tercer y cuarto puesto de Russell y Hamilton y acabaron quinto y séptimo respectivamente. Entre medio de ellos el mexicano Sergio Pérez (Red Bull).
Para Alpine, sus dos pilotos bajaron una posición respecto a los primeros entrenamientos, dejando buenas sensaciones con Alonso noveno, después de realizar pruebas de ritmo de carrera en los últimos 20 minutos. Además, el asturiano podrá sacar provecho de las numerosas penalizaciones que se han conocido este viernes.
La jornada estuvo marcada por el fallecimiento de la Reina Isabel II de Inglaterra. El ‘paddock’ al completo guardó un emotivo minuto de silencio en la jornada matinal en homenaje de la monarca, solo roto por un sentido aplauso. ‘Súbditos’ como los británicos Hamilton, Russell o Norris, el australiano Daniel Ricciardo (McLaren) o el canadiense Lance Stroll (Aston Martin) portaron brazaletes negros.
La acción se trasladó a la pista, pero las noticias saltaban fuera de ella, confirmándose que Hamilton, Yuki Tsunoda (AlphaTauri) y Sainz, que perdió 15 puestos por cambiar componentes y montó su cuarta centralita, saldrían desde el fondo de la parrilla por cambiar motor. También al final, aunque por delante de ellos, partirán Bottas y Pérez, quien cambió la caja de cambios y se retrasará diez.
Unas sanciones que trastocarán por completo la parrilla y de las que tampoco se librará el líder del Mundial, el neerlandés Max Verstappen, que sustituirá el motor de combustión interna (ICE) y que se verá lastrado cinco posiciones. Entre los pilotos de la zona alta de la general, solo Leclerc parece librarse.
