El imputado L.D.S.C. declaró ante la justicia tras la comparación de su ADN con el hallado entre las pertenencias de la víctima y la Fiscalía Departamental de Rocha de 2° turno, a cargo de la fiscal Jessica Pereira refutó esta expresando que la única explicación razonable y que explica la presencia de su ADN en el DNI de Lola Chomnalez y en la toalla que tenía en su mochila es que este fue uno de los autores de su homicidio.
Con mérito a lo expuesto, la Fiscalía entiende acreditados los requisitos legales para peticionar el Procesamiento y prisión del imputado como presunto autor responsable del delito de homicidio muy especialmente agravado.
«El procesamiento se solicita con prisión atento a la gravedad del delito, la pena a recaer y la existencia de delitos anteriores. Tratándose del delito más grave previsto por el orden jurídico nacional, amerita la existencia y presunción de riesgo de que el imputado puede pretender sustraerse de la acción de la justicia en caso de que se realice el juicio sin encontrarse detenido, amén de tratarse de un delito que se castiga con pena de penitenciaría», explican en la solicitud.
Declaración
Consultado por la existencia de ADN en los objetos pertenecientes a Lola Chomnalez, L.D.S.C. manifiesta que se encontraba trabajando en Valizas por la temporada desde aproximadamente las fiestas (24 de diciembre de 2014 en adelante) y que solía caminar a la playa en su hora libre.«(…) caminé bajando por la principal a la izquierda y avisté una mochila rosada, como una mochila olvidada en la playa. Trabajando en el supermercado se me cae un casillero de cervezas que pedí curitas a la cajera. Lo único que hice fue abrir la mochila, pero no hablé con ella, ni la vi…. Yo la abrí, lo que sustraje de la mochila fue plata, pero fue a los días de esto, por lo menos 15 días o alguno más que veo en la televisión… que había aparecido la mochila enterrada…».
De acuerdo con la versión de S., el se retira luego de hurtar el dinero, dejando la mochila en el mismo lugar que la había avistado en primera instancia. Interrogado respecto al hallazgo de la mochila días después y enterrada, señala que «(…) no tiene ningún sentido que se lleve la mochila a dos kms. No tiene lógica, fue una mochila que estaba olvidada en la playa y nada más, no hice nada malo (…)».
