La obra de Petrona Viera se expone en la Galería Nacional de Bellas Artes de República Dominicana

La "maestra" uruguaya del planismo, encierra una vida de valentía frente a la adversidad.

La exposición Petrona Viera: Creación sin Fin, dedicada a la maestra del arte de Uruguay, se presentará a partir de este martes en la Galería Nacional de Bellas Artes de República Dominicana. Es la primera vez que en ese país se exponen pinturas, dibujos y grabados de esta gran artista. Esta exposición se realiza gracias al Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay y al Museo Nacional de las Artes Visuales en Montevideo, dependiente de la Dirección Nacional de Cultura.

Petrona Viera, pintora que ha dejado huellas singulares en la historia del arte, fue una mujer valiente y una artista magistral, primera pintora uruguaya reconocida nacional e internacionalmente que haya nacido antes del 1900.

Tiene un estilo y una personalidad pictórica inconfundibles por la seducción del color y su temática de escenas cotidianas con cuadros de niñas, adolescentes y señoras, siluetas en actitudes naturales y un ambiente armonioso.

Petrona Viera nació en 1895 y murió en 1960. Petrona fue hija de Carmen Garino y Feliciano Viera (Presidente de la República entre los años 1915 y 1919). Sufrió a los dos años una meningitis que la dejó sorda, aprendió desde pequeña con una maestra especializada a leer los labios y hacerse entender por lengua de señas. Sus padres entendieron que la enseñanza era fundamental, por lo que contrataron a una maestra francesa especializada en niños sordos, Madeleine Larnaudie, quien se encargó de educar a la niña para que lograse comunicarse con su entorno.

Fue «planista». En el período comprendido entre 1920 y 1930 varios artistas uruguayos como José Cuneo Perinetti, Carmelo de Arzadun y Alfredo De Simone, entre otros, realizaron obras planistas. Los temas de Petrona Viera, sin embargo, son distintos a los típicos de los planistas, ya que prefirió pintar escenas cotidianas por ejemplo: de su casa, de niños jugando y estudiando, de los sirvientes, del trabajo de sus hermanas con el tejido.6​ Con el correr de los años, comenzó a pintar paisajes, en los que los planistas se destacan mucho más. En 1923 comenzó a exponer en Montevideo, participando luego en exposiciones colectivas en Buenos Aires, París y también en Chile y Bolivia.7​

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