En las últimas horas, una noticia sacudió la interna del plantel de Peñarol. La misma implica a dos jugadores referentes del plantel principal.
El episodio tuvo lugar el 8 de marzo, en un salón de fiestas infantiles. Dos trabajadoras del lugar hicieron la denuncia, según informó Radio Universal.
La Abogada de las denunciantes, brindó declaraciones a Subrayado, sosteniendo que “nunca hay que poner en tela de juicio cuándo las víctimas deciden denunciar”. “La denuncia se demoró en un tiempo simplemente por un tema de agenda de la Fiscalía, si bien quisimos presentarla en el mes de marzo cuando fueron los hechos, se dilató en el tiempo y tuvimos fecha para el día de ayer”.
Valentina Díaz, defensora de las denunciantes, continuó expresando que “están con tratamiento psicológico” y desde la Unidad de Víctimas y Testigos de Fiscalía General de la Nación se contactaron “para contenerlas en el proceso”.
A la espera en Peñarol
“Estamos a la espera de que Fiscalía recabe las evidencias necesarias”, acotó la abogada. “Hay filmaciones, Fiscalía aún no las tiene, pero el salón de fiestas tiene cámaras de seguridad”. Las denunciantes tienen entre 30 y 35 años de edad. “La denuncia radica en delitos sexuales y amenazas. No hubo un intento de violación, pero sí un intento de abuso sexual”,,aseguró la profesional.
Pobre Ruglio, le dan una mala noticia un día sí y otro también. Lo de Schippacase, los líos con Colón de Santa Fe, los inicidentes repetidos en el básketbol, las peleas entre barras y jugadores, el papelón de la botella en el Antel Arena (cómo fue que entraron con una botella? Justo a ese muchacho la policía se olvidó de revisarlo?) Y ahora esto… Se le va el presupuesto en pagar abogados para futbolistas y «muchachos» de la barra.
Mas lo que va a tener que $$$ para comprar cuervos en el torneo clausura, que es lo unico que le queda deportivamente.
Escuche que querian un arreglo económico, de la fiscalia no escuche nada, como Gargano y Viatri están comodos. Si soy mal pensado mil disculpas y si hubiera pasado eso con un familiar haría lo mismo. Resarción ecónomica.
Estas tristes criaturas están convencidas como tantos otros que jugar al fútbol da patente de corso.
Resarcimiento.