La directora nacional de Protección Social del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Fernanda Auersperg, indicó que la política del programa Viviendas con Apoyo, implica priorizar a las personas en situación de calle y la vivienda, así como a trabajar el contexto de cada una de ellas. Con respecto a los resultados, destacó la autonomía y el sentimiento de pertenencia que logran los participantes.
El programa Vivienda con Apoyo proporciona alojamiento de larga estadía en viviendas independientes, para que quienes no dispongan de hogar, estén contemplados por alguno de los planes de la Dirección de Protección Social y no se encuentren en condiciones de solventar otra alternativa habitacional.
Mediante el alojamiento en una vivienda contribuye a facilitar la inserción sociolaboral. Así como reduce la incertidumbre de los participantes y les permite mayor control en las decisiones que afectan sus vidas.
Desde su implementación, en marzo de 2021, benefició a 303 personas en situación de calle. De las cuales 269 aún son apoyadas por el programa, que funciona con una tasa de retención de 79%. La jerarca consideró como muy importante esa cifra, comparada a parámetros internacionales para este modelo.
Según Auersperg, la problemática es multicausal y, por eso, las soluciones deben ser integrales. «Al proporcionar la vivienda, logramos que la persona viva más dignamente», indicó.
EUROsociAL+
El programa Viviendas con Apoyo contó con la asistencia técnica de la iniciativa EUROsociAL+, que brindó asistencia técnica de la Asociación para la Inclusión Residencial y Social (Aires) de España, a fin de que se incorpore el enfoque Housing First en el modelo de atención, adaptado a la realidad uruguaya.
Según explicaron Carmen Belchí y Ania Pérez, integrantes de EUROsociAL+, se elaboró un manual metodológico y una caja de herramientas. Con el fin de orientar la labor cotidiana de los equipos técnicos de gestión directa del Programa Viviendas con Apoyo.
Valoraron especialmente el trabajo del Mides y destacaron que la tasa de retención en el primer año de funcionamiento evidenció un gran resultado, si se toma en cuenta que en Europa se aproxima al 80%. «Para un primer año, es un resultado estupendo (…) Este es un camino que el Mides acaba de arrancar, pero que se va a instaurar como predominante en Uruguay, seguramente», afirmó Pérez.
