El ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, participó de la edición número 75 de la Asamblea Mundial de la Salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se celebra en Ginebra, y reclamó “favorecer un diálogo más fluido entre OMS y las oficinas regionales”. Asimismo, durante su discurso apuntó que “la pandemia de Covid ha reconfigurado la concepción de la salud y mostró los estrechos vínculos entre salud, economía, medioambiente y desarrollo, entre otros».
«Además, cambió nuestra visión sobre cómo enfrentar los desafíos sanitarios a escala local, regional y global», dijo el ministro, y recalcó el retroceso que la emergencia sanitaria causó en los objetivos de desarrollo sostenible. «Esto exige que intensifiquemos los esfuerzos colectivos para recuperar el terreno perdido», consideró Salinas.
Planteó que es necesario «ampliar el acceso equitativo a servicios de salud integrales; aumentar los recursos humanos calificados para la salud; evitar el malgasto en gobernanza; facilitar el acceso a medicamentos esenciales y vacunas y favorecer la producción regional de las mismas».
El ministro señaló ante la asamblea: “Debemos reconocer la interdependencia entre salud humana, animal y medioambiental mediante in enfoque de la salud única. Articular los mecanismos de prevención y respuesta rápidos, eficientes y efectivos frente a nuevas emergencias sanitarias”.
“Uruguay cree y está convencido que es fundamental seguir fortaleciendo los mecanismos de cooperación y trasladar los desafíos que hemos transitado y las lecciones aprendidas para fortalecer la recuperación posterior a la pandemia. Los sistemas de salud deben ser resilientes y contar con financiación sustentable para asegurar un acceso equitativo de todos los Estados a los insumos tanto médicos como humanos”.
“Por último, debemos trabajar intensamente para generar puentes de solidaridad basados en el pleno respeto de los derechos humanos, la dignidad de las personas, las razas, el origen étnico, la diversidad cultural, la igualdad y equidad de oportunidades para la plena realización del potencial humano y, particularmente, el acceso universal a una salud de calidad, eliminando los obstáculos jurídicos, sociales y económicos que impiden que se atiendan y se aborden las necesidades de los más vulnerables”.
