El país está atravesando varios desafíos al mismo tiempo, tanto en la carestía de la vida, los desafíos de la guerra y sus efectos sobre nuestras importaciones, la falta de empleo y la inseguridad creciente. Esos desafíos nos tienen que llevar a nuevas formas de hacer política pensando siempre desde las necesidades de nuestra gente. ¿Y cómo se logra ello? Pues estando cerca, lo más cerca posible de lo que le acontece a nuestro pueblo.
Y estando cerca de nuestra gente, a través de la militancia de a pie, nos damos cuenta que hay un proceso de construcción y defensa de derechos clave para evitar atropellos. A pesar de que se perdió una instancia de consulta popular, nosotros como actores políticos tenemos que seguir defendiendo los derechos civiles, políticos y sociales que entendemos se pueden ver amenazados por ciertas disposiciones.
Por ello es que necesitamos un Frente Amplio que cada vez mire con amplitud el horizonte político. El Frente Amplio tiene un proceso a jugar de aquí al 2024 y es de acumulación en el territorio y la militancia. Es tiempo de generar instancias de diálogo, de militancia y de presencia permanente en el territorio. Siempre en la lógica de sumar y no de restar, porque las exigencias del momento nos demandan poder acompañar a nuestra gente en el territorio.
Hay una lección aprendida del proceso de referéndum y de este tiempo que se está viviendo fuera del gobierno nacional, y es que el Frente debe mantenerse enraizado con los movimientos sociales. Y tenemos que superar las fronteras que se imponen en la política cotidiana y que no son reales. Es tiempo de hablar no solo con los movimientos sindicales, también con el campo, con las organizaciones sociales, deportivas, culturales y religiosas. Es tiempo de abrir un camino que sea de suma hacia un futuro gobierno nacional.
Es tiempo de cambiar la pisada. Hay que pasar hacia una actitud proactiva, no solo de oposición y llevar adelante una agenda de propuestas, como la Mesa de Integración Social que el Intendente Andrés Lima ha hecho al gobierno, con el objeto de lograr acuerdos transversales para bajar la enorme carestía de nuestra economía.
Esa es la actitud a la que hacemos referencia desde la actividad política cotidiana. Tenemos una necesidad imperiosa de oxigenar el Frente Amplio con más instancias de participación y recuperación de agenda de propuestas. Y ese es el rol que queremos llevar desde el Encuentro Federal Artiguista.
En el FA no solo hay tres grupos. Si bien integramos los “grupos más pequeños”, vamos con humildad consolidado un Encuentro de carácter Federal que recorre una y otra vez el interior del país buscando ampliar nuestros horizontes y también así lo hace en la zona metropolitana. Es tiempo de que podamos sumar y articular las múltiples miradas del territorio en un proyecto que traiga nuevamente a los desencantados a un espacio político que ponga en el centro las necesidades de nuestra población.
Es por eso que no debemos descuidar la política departamental y seguir sumando desde los horizontes más impensados, porque allí podemos encontrar una voz que necesita ser escuchada y representada. Con una mirada profundamente artiguista, necesitamos salir a ese encuentro, en que la causa de los pueblos no admite la menor demora.
Desde la bancada de diputados, seguiremos trabajando en un camino de suma, articulación y construcción con miras a atender las necesidades de nuestra gente.
