¿Cómo, cuándo y porqué comenzó el conflicto en la industria láctea? ¿En qué está actualmente el mismo?
El conflicto es la industria láctea producto del Consejo de Salarios. Desde diciembre del 2021 hasta mayo del 2022 estuvimos en negociaciones para tratar de avanzar en acuerdos en la ronda del Consejo de Salario.
Hasta mayo hubo una serie de temas que se avanzaron y apareció la cláusula de paz que quería la Cámara de la Industria Láctea del Uruguay (CILU), que pretendía abarcar mucho más de lo que era la negociación. Eso motivó que se cerrará la negociación y que el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) no tuviera más capacidad, en principio, de poder avanzar.Históricamente siempre se han firmado estas cláusulas en los Consejos de Salarios, (no es algo nuevo).
A partir del 3 de junio, comenzamos a tomar medidas de trabajo a reglamento a nivel de todos los sindicatos de la Federación Láctea. Luego, en julio tomamosmedidas de paro, que fueron aplicadas hasta el 14 de julio en los diferentes sindicatos.
Desde esa fecha hasta ahora, a pedido del MTSS, en función de esta nueva instancia de negociación que han promovido, hemos dejado en suspenso la profundización de las medidas, aunque si mantenemos el trabajo a reglamento.
El pasado martes 26 de julio, (se hizo otra tripartita en el MTSS) donde llevamos alguna alternativa nueva a la cláusula de paz con respecto al alcance de la misma y también lo hizo la CILU.
¿Cuáles fueron las distintas etapas del este conflicto, ya que surgieron algunas cosas en el medio?
Por un lado, nosotros veníamos con este tema desde varios meses en negociación y la situación complicada se planteó en la cláusula de paz, pero también el 27 de junio la Cooperativa Nacional de Productores de Leche (Conaprole) despidió una trabajadora,de forma arbitraria, abusiva y sin ninguna razón y elemento. Ni siquiera a más de un mes del despido, se le ha entregado documentación escrita a la trabajadora de los motivos. Era una compañera de 15 años de trabajo en Conaprole sin ninguna observación ni sanción.
Esto lo que ha generado (es malestar), a pesar de que queremos llegar a un acuerdo en los Consejos de Salarios.Se podrá llegar a un acuerdo por los salarios, pero si este despido sigue arriba de la mesa,el conflicto lo mantendremos. Así que se fijó una nueva instancia en el MTSS para el próximo viernes 29 de julio para tratar este tema.
Dependemos de la respuesta de Conaprole y ahí veremos si se puede avanzar en este aspecto o si tenemos tanto el Consejo de Salarios como el despido resuelto, o ambos casos con problemas, o uno con solución y el otro no.
¿Cómo ha sido la relación de la FTIL con el MTSS?
El MTSS ha tenido dos actitudes. La primera es la del ministro, Pablo Mieres, que inclusive la CILU, FTIL y el sindicato de Conaprole tuvimos reuniones con él en estos meses anteriores de que se generara el conflicto. En ese momento, entendíamos que Mieres trataba de contribuir a la solución. También nos consta que se reunió con los productores, con la CILU y Conaprole.
Por otro lado, tenemos la actitud de los negociadores y el propio director Nacional de Trabajo, Federico Daverede y su equipo, que intentaron siempre de buscar soluciones y acercar a la parte, lo que es su rol correspondiente.
En los últimos tiempos, el ministro ha salido con manifestaciones que no condice con el ánimo de lo que han sido las negociaciones, de la voluntad que hemos puesto los trabajadores y los negociadores del ministerio.
El ministro ha salido a tomar partido y a dar calificativos de lo que ha sido el proceso de negociación cuando no estuvo en ningún momento en el proceso. Entonces, señalar que es el conflicto más largo, cuando llevamos desde el 3 de junio hasta ahora medidas, es no conocer la realidad, ya que hubo conflictos mucho más largos. Nuestro problemahoy no lleva dos meses. Hemos tenido conflictos de más de tres o cuatro meses a nivel de toda la rama.
¿Cuál es el motivo por el cual no han aceptado la cláusula de paz?
Nosotros no hemos aceptado la cláusula de paz y nos negamos a ella porque está muy alejado de la realidad. Nos negamos a esta que pretende la CILU que era por todo concepto, donde no podíamos tomar medidas con respecto a los salarios.
Nosotros entendemos que siempre se firmaron cláusulas de paz referido a lo que es la negociación, lo que se trató, discutió y acordó y al alcance que tiene el Consejo de Salario. Por ejemplo, hay temas como las categorizaciones que no se firman a nivel central porque cada empresa y cada sindicato tiene categorías propias e independiente porque las realidades son muy difíciles, desde tareas hasta hechos de salarios.
Por ahí fue que se encerró el tema y decir que nosotros nos negamos a una cláusula de paz y decir que no nos viene nada bien no tiene que ver con el hecho de lo que ha sido la historia de negociaciones nuestras en los Consejos de Salarios con la CILU. Ahora, que no compartamos el tenor de una cláusula de paz, y que en algún momento se había alineado el MTSS aunque ahora se ha retirado un poco para permitir que se puedan buscar alternativas de negociación en esta cláusula, nos parece que es lo correcto.
¿Cómo es la relación entre el sindicato y Conaprole?
También ahí tenemos que decir que muchas veces se magnifican más los problemas que las situaciones. A lo largo del año 2018 que fue la última ronda de Consejo de Salarios, donde también discutimos algunos temas de Conaprole y la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC), estuvimos tres años (18 19 y 20) donde no hubo mayores problemas de relacionamiento. En 2020 con la pandemia, fuimos de los primeros sindicatos y empresa que firmaron un protocolo en cómo tratar la pandemia, con seguro de paros rotativos por sectores, pago compensatorio de la caja de auxilio, entre otras.
Podemos tener 100 acuerdos pero si hay un desacuerdo que lleva a que haya medidas se potencializa ya que Conaprole tiene un peso específico en la sociedad, que hace ver las cosas magnificadas.
Cierre de Conaprole
Cada vez que hay una situación nuestra se expone in extremo. Se habla hace 20 y pico, desde el año 97 u 98 de la venta de Conaprole, ahora también, pero esto no es algo probable ni fácil. Pensar esto, es entregar la lechería o la mayor parte de esta a capitales trasnacionales.
